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El poder del juego: cómo los recursos adecuados pueden inspirar el aprendizaje de tu bebé

La educación temprana no se trata solo de enseñar conceptos o seguir rutinas. Se trata de jugar, explorar y descubrir juntos.Durante los primeros años, cada experiencia cotidiana —una canción, una historia, una caminata— se convierte en una oportunidad para aprender.El entorno del hogar puede ser el mejor espacio educativo si lo llenamos de curiosidad, cariño y juego. Aprender a través del juego El juego es el lenguaje natural de los niños. A través de él desarrollan habilidades cognitivas, emocionales, sociales y motoras sin siquiera darse cuenta.Jugar no solo estimula su mente, también fortalece el vínculo afectivo con quienes los acompañan.Cuando te involucras, el aprendizaje se vuelve más significativo y lleno de alegría. A continuación, te compartimos algunas ideas para acompañar su desarrollo desde casa con recursos simples y llenos de valor educativo. 1. Libros ilustrados y de texturas Leer con tu hijo desde pequeño despierta su imaginación, enriquece su lenguaje y cultiva el amor por las historias.Elige libros con colores vivos, texturas o solapas para explorar juntos. Nombra los objetos, haz voces de personajes y deja que toque las páginas.No importa si aún no entiende todas las palabras: lo importante es crear un momento compartido que asocie la lectura con afecto y diversión. 2. Juegos de construcción Los bloques, encastres o piezas apilables estimulan la coordinación ojo-mano, la paciencia y el pensamiento lógico.Además, fomentan la creatividad: con ellos puede construir torres, casas o mundos imaginarios.Acompáñalo con preguntas como “¿qué estás construyendo?” o “¿cómo podríamos hacerlo más alto?”, para incentivar el razonamiento y el lenguaje. 3. Música y canciones infantiles La música es una herramienta poderosa para el desarrollo temprano.Cantar canciones, mover el cuerpo al ritmo o tocar instrumentos simples como maracas o tambores mejora la memoria, el ritmo y la expresión emocional.También ayuda a regular las emociones y a fortalecer la conexión afectiva entre padres e hijos.¡No importa si desafinas un poco! Lo que realmente importa es disfrutar juntos del momento. 4. Plataformas educativas Hoy existen opciones digitales que transforman el aprendizaje en una experiencia interactiva.Sitios como Starfall, ABCmouse o Khan Academy Kids ofrecen actividades para aprender a leer, sumar o reconocer letras de manera lúdica y segura.Elige contenidos adecuados para su edad, limita el tiempo de pantalla y acompáñalo mientras explora. Así, la tecnología se convierte en una aliada, no en una distracción. 5. Actividades cotidianas El aprendizaje también ocurre en los pequeños momentos del día.Cuenta frutas mientras cocinan, nombra los colores al vestirse o identifica sonidos durante un paseo.Estas experiencias simples desarrollan vocabulario, observación y lógica sin necesidad de materiales especiales.Cada instante puede convertirse en una lección si lo acompañas con atención y entusiasmo. Cada juego, canción o lectura es una semilla que impulsa el aprendizaje.La educación temprana comienza en casa, con amor, presencia y curiosidad compartida.Acompañar sus descubrimientos no solo fortalece su desarrollo cognitivo, sino también el vínculo más importante de todos: el que tiene contigo. Jugar es aprender, y aprender juntos es crecer en conexión. No olvides seguirnos en nuestras redes sociales @babysteps.cl, donde compartimos consejos, experiencias y mucho más para acompañarte en este inolvidable viaje.